Desilusión y esperanza

Bien leída, la derrota de hoy puede servir de trampolín hacia el objetivo de ascender a la "B".

Es cierto, arrancar el campeonato con una caída como la que sufrió Pechos ante Pasame un Hígado siempre es desilusionante. Y es que los veteranos de Barrio Norte realmente no se esperaban un 4 a 0 en contra. Pero, por más que el resultado espante, la cosa no es tan dramática.

El partido se perdió en unas pocas pelotas. La primera, cuando atrás no se supo dar las garantías que el equipo pedía para encargarse tranquilamente de encontrar el gol. Minutos más, minutos menos, el 1 a 0 iba a llegar, pero una desconcentración en el fondo seguida de una falta ingenua cambió todo. 0-1. A partir de allí, el trámite se complicó, pero PCFC no se dejó ganar por el nerviosismo y el empate, aunque díficil (porque a partir del gol, Hígado se cerró mucho más abajo), no parecía una utopía.

Con empuje y con la frescura que aportó Beltri con su entrada, a pesar de errores inocentes que transformaron a Huguito en figura, del desorden en el medio que permitía que Hígado se adueñase de la pelota y de la dificultad para poner a un compañero de cara al arco, Pechos encontró en el penal una inmejorable oportunidad que no supo aprovechar. Más allá del golpe anímico y de las propias limitaciones, el conjunto del centro siguió buscando.

Finalmente, Hígado cerró el partido a 15 minutos del cierre, tras una corrida maratónica de un peladín que nos volvió locos. 2 a 0, partido liquidado y se abrió la catarata de goles para el calvo delantero rival.

Si el 4 a 0 fue decepcionante, también debe decirse que el rival era uno de los que pelearán arriba en la tabla. Conclusión: este partido fue una buena medida para Pechos, con plantel casi completo y contra uno de los que aspiran al campeonato. Y la sensación es que a rivales como este les podemos ganar y que el partido lo perdimos nosotros porque fallamos en las jugadas que marcaron el destino del resultado. El detalle no es menor porque, si aprendemos de los errores, le ganamos a cualquiera.

Señores, está confirmado. Pechos puede hacer una gran campaña y solo depende de sí mismo para lograr su objetivo.